Hay que diferenciar entre tratamiento agudo y tratamiento crónico.
I. TRATAMIENTO AGUDO
El tratamiento agudo para las taquicardias de QRS estrecho en Urgencias es estándar: adenosina, que bloquea el nodo A-V completamente durante un segundo. Por lo tanto si las taquicardias dependen del nodo A-V, se cortan. Hay que tener cuidado con pacientes broncópatas (asma, problemas bronquiales), aunque sus efectos secundarios desaparecen rápidamente. Tanto la acción como los efectos secundarios se producen de manera muy rápida.
En pacientes con síndrome de Wolff-Parkinson-White y, además, fibrilación auricular (preexcitada) hay que evitar los fármacos que enlentecen el nodo A-V y que favorecen la conducción por la vía, lo cual apoyaría el desarrollo de fibrilación ventricular. A veces se realiza cardioversión —previa sedación— de una fibrilación auricular preexcitada, por producción de deterioro hemodinámico. Como fármacos se pueden utilizar procainaida I.V. o amiodarona I.V.
II. TRATAMIENTO CRÓNICO
Para el tratamiento crónico de prevención de la taquicardia se administran fármacos que inciden en la vía accesoria, como los del grupo IC (propafenona, flecaimida), que afectan a las propiedades de dicha vía, si bien el tratamiento de elección es la ablación de la vía mediante catéteres en el corazón, aplicando frío o calor en la zona de la vía para interrumpirla. El porcentaje de curación es cercano al 100 %.