El control periódico del tratamiento debe basarse en la historia y la exploración física. Debe realizarse una radiografia de tórax y una analítica si se sospechan complicaciones adicionales o cambios evolutivos.
La frecuencia de los controles periódicos y los motivos de consulta al especialista varían según la gravedad de la insuficiencia cardiaca y de los problemas que plantee.
Si persisten los síntomas, debe revisarse el plan de tratamiento y su cumplimiento por el paciente.
No está justificada la repetición periódica del estudio ecocardiográfico salvo en estos casos:
- Insuficiencia mitral o aórtica severa pendiente de indicación quirúrgica.
- Miocardiopatía dilatada en fases iniciales ante la posibilidad de mejoría espontánea.
- Aparición de nuevos soplos o sospecha de nuevos factores etiológicos.
- Insuficiencia cardiaca refractaria.
- Agravamiento del grado funcional.