La cardiopatía isquémica es la afectación cardiaca que tiene lugar como consecuencia de un inadecuado aporte de oxígeno al miocardio. En la mayor parte de los casos esto se debe a un problema en las arterias coronarias. El proceso principal que subyace a la coronariopatía es la aterosclerosis que, en gran medida, es posible prevenir. La aterosclerosis, en general, y la aterosclerosis coronaria en particular, se desarrollan como consecuencia de una serie de factores de importancia diversa. Alguno de estos factores tiene una base genética, y otros no son modificables, como la edad. Pero muchos son modificables y, lo que es más importante, su modificación puede reducir la incidencia de la enfermedad
La OMS estima que tres cuartas partes de la enfermedad cardiovascular se podrían evitar con un adecuado estilo de vida.